A diferencia de las barreras de explosión activas, las válvulas de aislamiento de explosión accionadas por flujo se cierran por la fuerza de la onda de presión en sí y no requieren un suministro de energía externo, detectores o controles del sistema. Las válvulas están diseñadas para cerrarse en milisegundos proporcionando una barrera mecánica contra la llama y la presión.